Antigua casería de piedra y madera totalmente restaurada respetando el estilo arquitectónico y el paisaje de la zona.

Data de finales del siglo pasado y conserva un hórreo y amplia finca ajardinada con frutales, todo ello en un núcleo rural de incomparable belleza, a 4 km. de la playa.

La casa se encuentra rodeada de prados, tiene unas vistas panorámicas de un bonito valle y de unos grandiosos bosques.

Está formada por dos plantas: en la baja nos encontramos con un majestuoso salón, además de comedor y una cocina de 65 m.

La planta alta está formada por 5 hermosísimas habitaciones con baño en todas.

En las misma propiedad hay otra casa de 7 plazas de alquiler completo.